El laminado y el plastificado son dos técnicas que se utilizan para proteger y prolongar la vida útil de documentos y otros materiales impresos. Ambos procesos implican la aplicación de una película de plástico a través de rodillos a presión, pero la diferencia principal entre los dos es el grosor del material plástico utilizado. El laminado se compone de una película de plástico de aproximadamente 50 micras de espesor, mientras que el plastificado es de entre 100 y 200 micras.
Como resultado, los documentos plastificados son más rígidos que los documentos laminados. Sin embargo, el laminado se puede aplicar en frío o en caliente y a 1 o 2 caras, según el material, mientras que el plastificado se aplica siempre con calor y a doble cara. Es importante destacar que algunos productos, como los vinilos adhesivos, no deben ser sometidos a calor, y por lo tanto, siempre deben ser laminados en frío.
Las máquinas laminadoras y plastificadoras son capaces de trabajar con una gran variedad de materiales, incluyendo tarjetas de visita, cartas de restaurante, posters, portadas de libros, y vinilos, entre otros. El laminado es especialmente útil para materiales que necesitan un acabado brillante o mate, así como para aquellos que necesitan una mayor durabilidad y protección contra el desgaste, la humedad y la luz solar. Por otro lado, el plastificado es ideal para documentos que requieren protección y rigidez, como tarjetas de identificación o certificados.
Acabados
En cuanto a los acabados, los plastificados o encapsulados se limitan a acabados mate o brillante, aunque hay diferentes grosores de plastificado para dar más o menos rigidez a los documentos. En cambio, el laminado ofrece una amplia variedad de acabados, incluyendo laminado antideslizante para impresiones de suelo, laminado softoutch de acabado sedoso, y laminado antihuellas.
Para concluir, claramente tanto el laminado y el plastificado son técnicas similares que se utilizan para proteger y prolongar la vida útil de documentos y otros materiales impresos, y la preferencia dependerá de las necesidades de cada quien, recordando que la principal diferencia entre los dos es el grosor del material plástico utilizado, lo que resulta en documentos más rígidos cuando se plastifican. Pero la verdad es que las máquinas laminadoras tienen más versatilidad para trabajar con una gran variedad de materiales, y un acabado más elegante, el cual puede ser aprovechado en toda oficina o imprenta para cumplir con cada proyecto. Conoce nuestras laminadoras aquí.